El caso Cristiano

En esta semana en la que se ha hablado más de Mtiliga que lo que se va a hablar en toda su carrera no me resisto a hablar sobre la expulsión y la posterior sanción de Cristiano Ronaldo.

Como dicen los científicos partamos de un par de premisas. Lo que hizo Cristiano Ronaldo es una agresión, pero entendida como el acto de acometer a alguien para herirlo. esa es la definición de la RAE y según Cristiano soltó el brazo para que Mtiliga le dejara en paz. Segundo, no es una agresión como lo entienden los futboleros. No hay premeditación, ni alevosía, es un simple manotazo. Tercero, la sanción es correcta. Desarrollemos las premisas.

La agresión de Cristiano es la más leve de las agresiones, pero no podemos negar que la consecuencia es una nariz rota de un compañero de profesión. Un jugador para el que perderse un mes de competición puede ser la diferencia entre seguir en un equipo o tener que irse, entre seguir en Primera o el descenso. Parece una tontería, pero por el simple hecho del respeto a un compañero, Cristiano no debería tener esa actitud.

Efectivamente no fue una patada sin balón o un puñetazo o un codazo alevoso. Pero no deja de ser una agresión. No me vale la excusa de es que me pegó el primero. Ese no es el mensaje y menos para un jugador como Cristiano y un club como el Real Madrid. Aquí entra la parte romántica del fútbol, esa parte en que las personas como yo que ven en el fútbol algo más que 22 tíos corriendo semi en pelotas detrás de un trozo redondo de cuero, reclaman a todo profesional. Yo creo firmemente que el fútbol es un generador de valores para la sociedad. Por eso hay mucha gente, entre ellos muchos niños, que toman como ejemplo lo que hacen sus héroes y Cristiano es un ejemplo a seguir. Por eso digo que no me vale la excusa "es que me estaba agarrando y yo sólo quería que me soltara". NO, NO y NO. Hay muchos niños viéndote y muchos niños al que agarran jugando en infantiles, no podemos lanzar el mensaje "si te agarran de la camiseta tienes derecho a golpear al otro".

Por eso estoy de acuerdo con la sanción. En primer lugar porque es reincidente y en segundo lugar porque soy partidario de la premisa de Spiderman: "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad" y Cristiano tiene un gran poder.

Lo último que quiero expresar es mi gran decepción con dos instituciones: el Real Madrid y la prensa (el cuarto poder). No soy partidario de los recursos. Si por mi fuera no existiría el Comité de Apelación y los rearbitrajes, simplemente porque cualquier decisión hace injusta otra similar en la que no han actuado. También tengo la firme convicción de que hay equipos que por su grandeza no deberían recurrir nunca, y el Real Madrid es uno de ellos. Por eso no entiendo la campaña que se inició desde el mismo final del partido con la connivencia de los medios de comunicación más cercanos al club. Poder, grandeza, niños, Spiderman son palabras superiores que hay que pensar mucho cuando se utilizan y a los mitos no hay que cuidarlos, ellos tienen que cuidar de ti.